Canederli

O, como fueron bautizados por mis amigos españoles… las pelotas alpinas :)

Las recetas más simples son muchas veces las más buenas, no? O al menos eso es lo que pasa con la mayoría de los platos “pobres”, “del pueblo”, aquellas recetas que tienen su origen en la necesidad de aprovechar todo, hasta lo que no había. Estas recetas suelen ser ricas de sabor y de historia :)

Estas “pelotas” se encuentran fácilmente en las cocinas de Alemania, Austria y la República Checa. En Italia son típicos de las zonas más al norte colindantes con Austria, es decir Trentino, Friulli y la provincia de Belluna. Se podría decir que son como nuestros potajes porque allá donde vayas te los hacen de una forma diferente pero siempre tienen algo en común. En el caso de los canederli suelen tener una forma redondeada, del tamaño de un huevo y como consistencia se parecen mucho a los ñoquis ya que están hechos con una masa de pan, leche y huevos que luego cada cual prepara como manda la tradición.

Esta forma de hacerlos es una de las más tradicionales en Italia pero hay quien le pone setas, espinacas o… bueno, de todo un poco. Son super fáciles de hacer, muy rápidos y sustanciosos. Sí, quizás no sean lo mejor ahora que está empezando el calorcito pero una vez que los probéis a ver quien es el guapo que dice que no a los canederli??!!

Yo los conocí en un restaurante que tenía un amigo mío cuando llegué a Italia. Ellos los preparaban sin el caldito, con una salsa de rábano que bueno, estaba para morirse de buena!!

Desgraciadamente el restaurante hoy no existe pero el recuerdo de los canederli sí :) Llevaba siglos queriéndolos hacer pero ya sabéis vosotros como son estas cosas que si hoy no por esto que si mañana no por lo otro. Y finalmente me decidí a probar :)))

Si no os atrae la idea de comeros un caldico caliente con estas temperaturas primaveriles probad a hacerlos y luego pasadlos por la sartén con un poquito de mantequilla y salvia. Para relamerse los bigotes!! :P

Ah, se me olvidaba. En la receta original se utiliza un embutido llamado speck que es típico de la zona del Tirol, es un jamón ligeramente ahumado que no sé hasta qué punto será fácil de encontrar en España. También se puede usar la pancetta como he hecho yo pero bueno, que podéis usar lo que más os guste: jamón serrano, panceta, bacon, tocino… no será por variedad ;)

Ingredientes:
Pan “sentao” o del día anterior 150 gr (sin corteza)
Panceta ahumada 100 gr
Salchicha fresca 50 gr
1 huevo
1/2 cebolla
1 l de caldo de carne
2 cucharadas de parmesano rallado
1-2 cucharadas de perejil picado
1 cucharada de harina
Aceite de oliva
Nuez moscada, sal y pimienta

Preparación:
1 Remojar el pan con unas cuantas cucharadas de agua o leche.
2 Cortar la panceta y la cebolla en trocitos pequeños.
3 En una sartén con una gota de aceite rehogar la panceta y la cebolla hasta que estén trasparentes. Cuando estén listas pasarlas a un cuenco y dejar enfriar un poco.
4 Añadir el pan, la salchicha sin la piel, el huevo, una pizca de nuez moscada, la harina, el parmesano, sal, pimienta y perejil. Mezclar todos los ingredientes con las manos creando una masa.
5 Mojarse un poco las manos para poder modelar la masa y hacer bolas del tamaño de un huevo.
6 Cocer los canederli en el caldo caliente durante 15 minutos.
7 Servirlos con el caldo y espolvoreados con un poco de parmesano rallado o sin caldo y salteados en una sartén con mantequilla y salvia.

Descárgate la receta en PDF:
Canederli in brodo


Miniflan con espuma de caramelo

No sé hace cuánto tiempo compré estos moldes super pequeñitos. Son monísimos pero hasta ahora no se me había ocurrido cómo usarlos. Son unos moldes como esos de toda la vida que se usan para hacer flan, de aluminio, pero mitad de la mitad, vaya, le caben 30 ml de líquido. Y qué mejor que ellos para hacer estos flanecitos liliputienses que quedan super bien como pre-dessert ;)

En realidad he usado un poco de la crema para hacer la versión mini y el resto lo he puesto todo en un molde más grande, rectangular que quedará también muy bien servido cortado en trocitos, como si fueran cubitos de flan.

Cuántas tonterías por dios!! ;) Lo que es cierto de todo esto es que hacía siglos que me moría por hacer un flan, uno de esos cremositos y doraditos por el caramelo… y como no me puedo estar quieta al final los hecho en versión mini y los he acompañado con una espuma de caramelo de la que, si no tenéis el sifón en casa, podéis pasar tranquilamente :P

Me encanta los dulces mignon, me parecen super elegantes y trasmiten todo el amor con el que los han hecho porque para hacer ciertas maravillas (mirad por ejemplo la pastelería Bubò de Barcelona) hay que ponerle ganas al asunto: ganas, técnica y una manos delicadas… no como las dos palas de excavar con las que me encuentro cada vez que quiero hacer alguna monería de estas.

Total que por esta vez ha salido bien y ha quedado muy cuco :P Para quien no tenga mini-moldes las cantidades de la receta sirven para unas cuatro personas en moldes individuales o bien uno de plum cake.

Que lo disfrutéis!

Ingredientes para el flan:
1/2 l de leche
70 gr de azúcar
2 yemas + 1 huevo
La cáscara de medio limón
1 vaina de vainilla

Ingredientes para el caramelo:
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de agua

Ingredientes para la espuma de caramelo:
2 cucharadas de azúcar
1 cucharada de agua
300 ml de leche entera
1 hoja de gelatina
1 sifón de 1/2 l
1 carga de N2O

Preparación:
En una cacerola poner a hervir 4 cucharadas de azúcar con 2 de agua. Cocer hasta que el azúcar se haya caramelizado. Tenemos que tener cuidado porque desde el momento en el que nos sirve a nosotros (cuando empieza a tomar color) hasta el momento en el que se quema puede pasar muy poco tiempo por lo que es mejor estar ahí controlando que no se nos queme.
Cuando el azúcar haya tomado un poco de color echarlo en el molde que vayamos a utilizar para hacer el flan y repartirlo bien por toda la superficie.
Esta operación es muy delicada ya que el caramelo alcanza temperaturas muy elevadas; tened mucho cuidado con no quemaros.
Dejad enfriar el caramelo.
Para hacer el flan:
Poner a hervir la leche con la cáscara de limón y la vaina de vainilla abierta por la mitad. Una vez que rompa a hervir dejar reposar unos 10-15 minutos.
Batir muy bien las yemas, con el huevo y con el azúcar hasta que la mezcla se vuelva un poco blanquecina. Colar la leche y añadirla aún caliente a la mezcla de huevo y azúcar. Remover bien.
Rellenar el molde que habíamos preparado antes con el caramelo y cocer en el horno al baño María durante unos 40 minutos a 150 grados.
Por último preparamos la espuma:
Poner en remojo la hoja de gelatina.
En un cazo calentar 2 cucharadas de azúcar con 1 cucharada de agua y caramelizar como habíamos hecho antes para el flan. Poner a hervir la leche. Cuando el caramelo esté en su punto añadir la leche poco a poco para que no salpique. El caramelo se fundirá con la leche dándole su característico sabor.
Escurrir la gelatina y añadirla a la leche aún caliente.
Pasar la leche por un colador de malla fina para eliminar grumos y rellenar el sifón. Cerrar, poner la carga de N20 y mezclar vigorosamente.
Dejar reposar en el frigo al menos un par de horas.
Servir el flan acompañado de la espuma.

Descárgate la receta en PDF:
Mini flan con espuma de caramelo


Chocolate a la taza con canela

Pues nada, ya se me va pasando el mal rato del otro día… La verdad es que ayer me levanté con un cabreo que ni os cuento. No por lo que pasó, no por la poca profesionalidad, no por la cara dura de la gente, estaba muy cabreada porque lo sabía… ya en diciembre cuando conocí a los dueños del bar había visto que algo no funcionaba y aún así he seguido adelante pensando que con mi esfuerzo podría compensar cualquier problema que se me presentara… vaya, ni que fuera superwoman!!

Pero eso ya es pasado y os agradezco mucho los mensajitos de apoyo que me habéis dejado. Como decía ayer de todo se aprende, yo tengo que aprender también a fiarme menos y a andar con más ojo. A ser más profesional y a ver los problemas antes de encontrármelos delante de mí con las fauces abiertas. Por esta vez está bien, más se perdió en la guerra y sobre todo mucho más han perdido ellos que han quedado super mal con toda aquella gente, uff, de esta si que van a tardar en recuperarse…

Quizás el hecho de que me hayan llamado para disculparse por la mala organización dice algo positivo de ellos. Quizás sí… o quizás no.

La vida sigue y hoy lo único que me apetecía era descansar :) He dormido, he comido super bien y ahora me espachurro en el sofá a ver una peli: plan dominical perfecto!

Como perfecto es este chocolate, de domingo total, en 10 minutos está hecho y en 10 minutos nos lo tomamos, calentito para endulzar el alma :)

Ingredientes para 2 personas:
2 vasos de leche
2 cucharadas colmas de cacao amargo en polvo
2 cucharadas de azúcar
1 cucharadita de fécula de maíz (Maicena)
Canela al gusto

Preparación:
Poner a calentar la leche.
Reservar dos o tres cucharadas en un vasito aparte.
Añadir el cacao y el azúcar a la leche caliente y remover hasta su completa disolución.
Disolver bien la fécula en la leche caliente que habíamos apartado.
Añadirla a la leche con cacao removiendo continuamente para evitar la formación de grumos.
Dejar cocer el chocolate hasta que espese.
Podemos añadir más o menos azúcar según nuestro gusto e incluso más o menos harina según cómo nos guste de espeso el chocolate.
Espolvorear con la canela en polvo y servidlo acompañado de vuestra tarta o dulce preferido, yo me lo he tomado con una rebanada de
trenza que esta vez he hecho con la misma masa en forma de pan.

Descárgate la receta en PDF:
Chocolate a la taza con canela