Aspic de frutas del bosque |

Hola gente! qué tal? cómo va la vida? Queda alguien por ahí? ;)
Estaba pensando que me parece que esta va a ser la última receta que publico antes de irme de vacas. No sé vosotros pero yo estoy super perri con este calor… además, creo que no hay vida más allá de la pantalla y hacéis muy bien!! Que lo que toca con estas temperaturas es un poco de aire libre, mar, montaña o lo que sea siempre que sea en buena compañía :)

No me vayáis a odiar por irme dejándoos un postre que parece de todo menos fácil. Paree mucho más historiado de lo que realmente es y, creedme, es fresco, muy delicado y una opción muy creativa para una cena de verano.

Yo soy super fan de los postres ligeros. Lejos de las comidas me encantan las copas de helado, las tartas, los postres elaborados y chocolatosos pero para después de comer o, mejor, cenar este tipo de postre para mí es la opción perfecta. Super ligero, fresco y cremoso :)

Tiene una base de gelatina, muy suave, hecha con un jarabe, menta y moscato (un vino spumoso italiano similar al cava dulce), con frutas del bosque variadas; pasamos luego a una especie de confitura/puré de melocotón, con trocitos del mismo melocotón. Y para terminar una crema de vainilla. Coronamos todo con algunas frutillas más y a ver quién es el guapo que se resiste.

Quizás pueda parecer difícil pero lo más “difícil” es pillarle el hilo a la gelatina. Personalmente, siempre que cocino con gelatina me entran los siete males: que si sale dura, que si sale blanda, que si no sale… En este caso va también un poco a gustos porque, con 3,5 gr de gelatina, para mí ha salido perfecta pero queda muy pero que muy suave por lo que quizás un poquito más no le vaya mal, sobre todo resultará más fácil montar el vasito sin que se nos desmorone todo al poner la segunda y tercera capa.

Así que, si os animáis, ahí van un par de consejos: 1. probadlo, porque es un postre realmente especial; 2. quizás hacer un par de pruebas para dar con la consistencia gelatinosa que más os guste y para, en el caso de querer prepararla para una cena como fue mi caso, no llegar al último minuto con la “angustia” de no saber si habrá salido o no ;)

Os dejo en compañía de uno de los postres que más me han entusiasmado este año. Espero que disfrutéis de vuestras vacaciones, que descanséis y que carguéis las pilas, que es lo que más nos hace falta con los tiempos que corren.

Nos leémos a la vuelta!! Yo estaré por estas tierras de las que ya hemos hablado un poquillo.

Ingredientes para 6 personas:
250 gr de frutas del bosque mixtas
300 ml de agua
50 ml de moscato o cava dulce
50 gr de azúcar
8-10 hojitas de menta
3,5 gr de gelatina (equivalente a 1 hoja)

Para el puré:
300 gr de melocotón
1/2 limón
20 gr de azúcar

Para la crema:
250 ml de nata líquida
1 vaina de vainilla
2 yemas
40 gr de azúcar
3 gr de gelatina

Preparación:
1 Empezamos preparando el aspic: poner la gelatina en agua fría para que se ablande. Hacer un jarabe poniendo el agua y el azúcar a calentar y remover hasta que el azúcar se haya disuelto. Añadir las hojas de menta y llevar a ebullición, bajar la lumbre y dejar cocer durante 10 minutos.
2 Apartar del fuego, eliminar la menta y añadir la gelatina escurrida y el moscato. Dividir en 6 vasitos individuales.
3 Lavar y secar delicadamente las frutas y distribuirlas entre los vasitos (antes de que la gelatina empiece a solidificar). Dejar cuatro o cinco frutitas por cada vaso para decorar.
4 Dejar que se enfríe y poner en el frigo hasta que se haya solidificado (unas 3-4 horas).
5 Mientras tanto podemos preparar el puré. Pelar y cortar los melocotones en trocitos pequeños. Poner la mitad de ellos con el azúcar y el limón en un vaso grande y batir con la batidora hasta obtener un puré. Mezclar con el resto de los melocotones. Distribuir el puré en los vasitos una vez la gelatina se haya solidificado y volver a poner en el frigo.
6 Para la crema: Poner la otra gelatina en agua fría. Llevar a ebullición la nata con la vaina abierta por la mitad (podemos rascar el interior con un cuchillo para sacar las semillas). En un cuenco batir las yemas con el azúcar. Verter la nata muy poco a poco sobre las yemas, removiendo rápidamente para que se mezclen bien. Volver a poner esta mezcla en el fuego y calentar sin que llegue a hervir. Escurrir la gelatina, eliminar la vaina de vainilla y añadir la gelatina a la crema removiendo muy bien.
7 Dejar que se enfríe un poco y añadir, como tercera capa al vasito. Dejar reposar en el frigo hasta el momento de servir.
8 Para servir decorar con las frutas que habíamos apartado y con un trocito de la vaina de vainilla