Y mientras preparo el peaso de artículo del fin de semana os dejo, como ya os anunciaba, unos apuntes del primer experimento con la yema de huevo marinada.
La yema de huevo marinada no es más que una yema de huevo que se deja marinar durante unas horas en una mezcla (a partes iguales) de sal y azúcar.
Yo la he dejado durante 4 horas (recubierta completamente!!! por arriba y por abajo, esto es importante ;) y lo que he conseguido es una yema consistente fuera y aún líquida dentro. Desde luego depende de lo que vayamos a hacer luego con ella; yo aún tengo que hacer muchas más pruebas para conseguir lo que estaba buscando…
Así cómo la hice yo es perfecta para usarla en algún plato con patatas al horno o algún puré de verduras. Parece dura y cuando la cortas entra en juego el factor sorpresa: está líquida y jugosita por dentro.
Ah se me olvidaba… pasadas las cuatro horas, sacarla con mucho cuidado y enjuagarla un poco bajo el agua del grifo para eliminar el azúcar y sobre todo la sal en exceso.
Más experimentos en próximos episodios de Operación Huevo…
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