Ayer estuve en un restaurante de esos que le dejan a uno con la boca abierta.
Parece ser que lo han abierto hace poquito, un mes o asi, pero el chef trabajaba en el restaurante Sadler que, a nosotros españoles, puede que no nos diga mucho a menos que seamos entendidos en cocina internacional. Yo por narices, gustandome como me gusta la cocina, los alimentos en general y comer en particular he llegado a conocerlo y apreciarlo porque es, en verdad, uno de los grandes… en fin pilarìn, dos estrellas michelin (www.sadler.it).
Pues fue excepcional porque ademas de la gran cocina todavia tiene un precio razonable y muchos muchos detalles.
La cena fue tal que asì:
Para empezar nos ofrecieron una copa con pastas saladas hechas en casa a base de hojaldre, tres o cuatro tipos diferentes y buenisimas.
Luego nos trajeron un aperitio de la casa, una crema de guisantes con salsa de regaliz y escamas de parmesano.
Pan casero de varios tipos, crackers, pan de olivas, con cebolla, etc.
Yo para empezar pedì unos ravioli con crema de manzana, ragu de cerdo y espuma de canela (no os cuento como estaban!!)
Paolo pidio una polenta con cotechino (que es una especie de gran salchicha fresca hecha con carne de cerdo, bastante graso y bastante bueno :) con salsa de vainilla (espectacular)
Luego pedimos un segundo para compartir: cordero con costra de frutos secos, alcachofa al horno y strudel de patata y manzana (uhmmmm)
Luego nos trajeron un vasito con una mouse de chocolate y espuma de menta.
Y para terminar un postre espectacular hecho de dos trocitos de crostata de crema y chocolate, una bolita de helado de nuez y una lagrima de crema del mismo sabor.
Total, toda una experiencia que esperamos repetir la semana que viene con unos amigos.

No es sólo comer… es disfrutar de los colores, las texturas, de las combinaciones más absurdas. El placer de ver una obra en un plato, por su composicion, por su forma; los cubiertos, la vajilla elegida para cada uno de los platos; cada detalle, las ganas de hacer las cosas bien, con gusto, con profesionalidad. Lo que yo viví ayer lo llamo ARTE :))